Musulmanas III
Hayar
Ahí, en las áridas tierras del desierto de
La esposa lo llamó : "¡Oh Ibrahim! ¡¿A dónde vas dejándonos en este inhóspito valle?! Pero el Profeta Ibrahim no le prestó atención, como si estuviera seguro de que la promesa de Allah no tardaría en cumplirse. Su esposa le preguntó entonces: ¿Acaso Dios te ordenó esto?. Y él le respondió que sí.
La esposa creía en Allah (elevado sea), y tenía plena confianza en Él, supo que en aquellos momentos tenía que ser una ayuda para su esposo para ayudarle a someterse a las órdenes de Allah, (elevado sea). El Profeta Ibrahim (la paz sea con él) se marchó recitando el siguente Duaa (súplica) : "¡OH Señor nuestro! He hecho habitar a parte de mi descendencia en un valle en el que no hay cereales, junto a tu Casa Inviolable; para que, ¡Oh Señor!, establezcan
[ Sura deIbrahim 37-38].
Se quedó sin comida ni bebida para alimentar a su bebé, incluso ella misma se quedó sin leche con qué amamantar a su hijo que lloraba a causa del hambre. Su llanto hacía eco en la tierra desierta y en las montañas de alrededor mientras el corazón de su madre se retorcía de dolor. La madre corrió al monte Safa para buscar a alguien que le ayudara, quería buscar algo de comida o bebida, pero no encontró nada. Bajó de aquel monte para ascender al monte Marwah en busca de sustento; lo hizo siete veces hasta que se cansó. Antes de caer en la desesperación, Allah (elevado sea) le envió al arcángel Gabriel (que la paz sea con él) quien golpeó la tierra con una de sus alas e hizo brotar agua de un pozo al lado del lugar donde se encontraba el pequeño. Al ver esto, corrió al pozo dando las gracias a Dios y empezó a dar de beber a su querido hijo (Ismail) tratando de salvarle diciendo al pozo: "zum-mi, zum-mi" motivo por el cual este pozo es conocido hoy como “manantial de Zamzam”.
“¡Que Al-lah sea Misericordioso con la madre de Ismail! Si ella hubiera dejado el agua de Zamzam (la fuente) como estaba (es decir, sin construir una cuenca para mantenerla), habría sido una corriente que fluye." (Narrado por Bujari)
Era Hayar-que Allah esté complacido con ella- , madre de Ismail y esposa de Ibrahim (conocido como el amado de Allah), conocida en
Hayar fue donada por un rey egipcio a Sara- primera esposa del Profeta Ibrahim(la paz de Allah sea con él)- cuando éstos emigraron a Egipto. Cuando Sara se hizo mayor donó a Hayar como esposa para su marido con la esperanza de que tuvieran hijos.
El Profeta Ibrahim (la paz de Allah sea con él) se casó finalmente con Hayar quien en seguida quedó embarazada y dio a luz a Ismail (la paz sea con él) . Sara sentía que había perdido el lugar que tenía en el corazón del Profeta Ibrahim (la paz de Allah sea con él) y por envidia pidió a su marido que llevase a Hayar lejos de ella. Ibraham (la paz de Allah sea con él) la llevó al desierto de
En lo sucedido a Hayar y a su hijo había una máxima para los creyentes.
Fueron días muy duros y pasaban lentamente hasta que un día algunos miembros de una tribu árabe llamada “Yorhom” quisieron quedarse en aquel lugar junto a Hayar y su hijo al ver que en su tierra había agua. Hayar les permitió vivir con ella y beber del agua de Zamzam ya que se sentía arropada por su compañía. El niño Ismail creció entre la gente de aquella tribu y apendió la lengua árabe. Al hacerse adulto, se casó con una mujer de la misma tribu.
Esa es Hayar, la madre del degollado [i]y de los árabes adnanitas; nos dejó tras darnos un gran ejemplo de mujer obediente, de madre cariñosa, de creencia firme y de fe sincera en Allah, Quien cuidó de ella y de su hijo en ausencia de su marido, y les dio sustento. Allah Todopoderoso, en honor a ella, hizo que uno de los rituales del Hayy sea recorrer la distancia que hay entre el monte de Safa y Marwah.
Hayar murió a los 90 años y fue su hijo Ismail (la paz sea con él) quien la enterró junto a
Por: Ali Ben Nayef Al Shahud
Traducido por: Sabah Chentouf Lkbir
Fuente. http://www.islam.aljayyash.net/encyclopedia/book-14-2
[i] Referencia a la visión que tuvo el Profeta Ibrahim (la paz sea con él) en la cual Dios le pedía que sacrificara a su hijo Ismail. Padre e hijo estaban dispuestos a cumplir las órdenes de Dios. Al haber superado la prueba por su sinceridad y sumisión, Dios envió un corderó a Ibrahim para que lo sacrificara en vez de a su hijo.