¿Cómo recibir al mes de Ramadán?
Alabado sea Allah Señor de los Mundos, atestiguo que no hay más dios sino Allah y atestiguo que Muhammad es su siervo y mensajero –que la paz y las bendiciones de Allah sean con él, su familia y todos sus compañeros.
Nuestros predecesores piadosos (salaf saleh) o sea los compañeros del Profeta –que la paz y las bendiciones de Allah sean con él- y los que les siguieron con benevolencia, daban mucha importancia al mes de Ramadán y les alegraba su llegada. Solían suplicar a Allah para que les permitiera alcanzarlo con vida y luego le suplicaban para que les fuera aceptado.
Durante el día, ayunaban y se preocupaban de preservar su ayuno de todo lo que pudiera anularlo o disminuir su retribución como las palabras vanas , perder el tiempo en los juegos y la diversión o bien murmurando, calumniando y mintiendo; vivificaban sus noches cumpliendo las oraciones nocturnas y leyendo el Corán.
Durante el mes se comprometían con ayudar a los pobres y necesitados dándoles limosna y actuando con benevolencia con ellos y ofreciendo comida a los ayunantes.
En Ramadán, luchaban contra su nafs obedeciendo a Allah. De igual modo, luchaban contra los enemigos del Islam para que la palabra de Allah fuera la más elevada y que la práctica de Adoración se dedicara por completo a Allah:
El 17 de Ramadán tuvo lugar la gran batalla de Badr en la que los musulmanes vencieron a sus enemigos. El 20, tuvo lugar la batalla de la entrada a Meca durante la cual grupos de personas volvieron al Islam convirtiendo así la ciudad en la casa del Islam.
Así pues, el mes de Ramadán no es un mes de flojedad y pereza como piensan algunas personas sino un mes de lucha, adoración y trabajo. Por eso debemos alegrarnos al recibirlo y darle una buena acogida,y cómo puede ser de otra forma, siendo él un mes elegido por Allah para que sea el mes del ayuno , de las oraciones voluntarias nocturnas y la revelación del Sagrado Corán para guiar a la gente y sacarle de las tinieblas a la luz. ¡Cómo podemos no alegrarnos con un mes durante el cual se abren las puertas del paraíso, se cierran las del infierno y se encadenan los demonios, se duplican las buenas acciones, se elevan los rangos y se perdonan los pecados!
Deberíamos aprovechar nuestra vida, salud y juventud obedeciendo a Allah y adorarle de la mejor forma y aprovechar la llegada de este generoso mes para renovar nuestro compromiso con Él, arrepintiéndonos sinceramente de todos los pecados. Hemos de aferrarnos a la obediencia de Allah Glorificado y Ensalzado sea toda la vida , siguiendo sus órdenes y evitando lo prohibido por Él, para que seamos de los vencedores el día en que ni la riqueza ni los hijos servirán de nada, sólo quien venga a Allah con un corazón limpio.
Dice el Verídico, Glorificado y Enaltecido sea : « Y quien obedece a Allah y a Su mensajero ha triunfado con gran éxito.» (Corán 33:71)
En Ramadán y durante el resto de los meses, debemos seguir cumpliendo los actos obligatorios y recomendables y alejarnos de las prohibiciones y de los hechos detestables siguiendo lo dicho por Allah Glorificado y Ensalzado sea : « Y adora a tu Señor hasta que te llegue la certeza». (Corán 15:99) o sea la muerte. Y dice: «Di: En verdad mi oración, el sacrificio que pueda ofrecer, mi vida y mi muerte son para Allah, el Señor de los mundos. Él no tiene copartícipes. Eso es lo que se me ha ordenado». (Corán 6:162-163).
Se recibe este mes con constancia sincera para ayunarlo y rezar durante sus noches con fe y anhelando la recompensa de Allah y no como un seguimiento a los demás. Nuestros miembros ayunan alejándose de los pecados , de las palabras y miradas prohibidas ; ayunan dejando de escuchar lo prohibido, dejando de comer y beber lo ilícito para que obtengamos el perdón y la salvación del infierno.
Debemos respetar los modales del ayuno, retrasando el suhur hasta la última parte de la noche(acercándolo hacia el llamado (Adán) del alba) y apresurarse a romper el ayuno (iftar) si estamos convencidos de la puesta del sol.
El ayunante debe esforzarse en hacer buenas obras y responder a quien le insulta diciendo « estoy ayunando » y no contestando con otro insulto. Evita corresponder a un pecado con otro sino con una obra buena y mejor para que su ayuno sea completo y aceptado.
Debemos ser sinceros con Allah al cumplir nuestras oraciones , nuestro ayuno y en todas nuestras acciones porque Allah Glorificado y Ensalzado sea sólo acepta aquellas buenas obras piadosas hechas buscando sólo Su faz. Y la buena obra es aquella obra hecha por Allah y que esté hecha de acuerdo con la Sunnah de Su Profeta –que la paz y las bendiciones de Allah sean con él-.
Es conveniente para el musulmán rezar las oraciones de tarawih (las oraciones voluntarias realizadas después de la oración del Isha durante el mes de Ramadán), siguiendo así al Mensajero de Allah –que la paz y las bendiciones de Allah sean con él-, a sus compañeros y a los Califas bien Guíados anhelando con ello la recompensa de Allah .
Dijo el Mensajero de Allah – que la paz y las bendiciones de Allah sean con él- : « Quien rece en las noches del mes de Ramadán con fe y buscando la recompensa de Allah le serán perdonadas todas sus faltas cometidas ». Hadiz de veracidad consensuada.
Y hay que señalar que quien se quede rezando hasta que el imam termine la oración es como si hubiera permanecido rezando toda la noche, del hadiz de Abu Dhar relatado por Ahmad y Tirmidhi quién lo declaró auténtico.
Es conveniente para el musulmán también pasar las diez últimas noches de Ramadán en adoración, rezando, recitando el Corán, recordando y suplicando a Allah (Dhikr y Dua) y pidiendo perdón (istighfar) , siguiendo de esta manera la Sunnah y buscando la recompensa de la Noche del Destino (laylatul Qadr) que es mejor que 1000 meses (83 años y 4 meses).
La Noche del Destino es una noche bendita porque Allah reveló en ella el Corán y en ella descienden los Ángeles y el Arcángel Yibril –que la paz sea con él-.
Es una noche durante la cual si un musulmán permanece en adoración con fe y devoción le serán perdonados sus pecados cometidos y está limitada en los diez últimos días de Ramadán, así que es conveniente para él esforzarse durante cada una de esas noches , tal vez acepte Allah nuestras súplicas y nos perdone ,nos haga entrar al paraíso y nos salve del infierno igual que a nuestros padres y a todos los musulmanes.
Durante los últimos diez días, el Mensajero de Allah –que la paz y las bendiciones de Allah sean con él- reforzaba su izaar* ( es decir, se apartaba de sus esposas para tener más tiempo para la practica del Din), pasaba la noche entera despierto (rezando) y despertaba a su familia. Y en el Mensajero de Allah –que la paz y las bendiciones de Allah sean con él- tenemos el mejor ejemplo . *(Reforzar el izaar ha sido interpretado como apartarse de las mujeres (para no distraerse) o esforzarse en la adoración).
El musulmán que ayuna debe observar la lectura del Glorioso Corán durante el mes de Ramadán, al igual que el resto del año, con reflexión y meditación para que sea una prueba y un intercesor para él el Día del Juicio Final. Y quien lo lea y actúe según su contenido, tiene la certeza de no ser ni de los extraviados ni de los desgraciados el Día del Juicio Final. Dice Allah Glorificado y Ensalzado sea : « ...quien siga Mi guía no se extraviará ni será desgraciado.» (Corán 20 :123)
Es provechoso para el musulmán estudiarlo con los demás para que se beneficien de los cuatro prestigios citados por el Mensajero de Allah –que la paz y las bendiciones de Allah sean con él- en este hadiz : Todos aquellos que se reúnen en una de las casas de Allah (las mezquitas) para recitar el Corán aprendiendo sus significados tratando de actuar según sus enseñanzas, descenderá sobre ellos el sosiego; serán cubiertos por la misericordia; estarán rodeados de ángeles; y Allah les menciona ante sus ángeles más cercanos." Relatado por Muslim.
El musulmán debe insistir a la hora de hacer dua (suplicar a Allah) y pedir perdón día y noche, durante el ayuno y el suhur, porque ha sido relatado en le hadiz auténtico que Allah Glorificado y Ensalzado sea, desciende al cielo de la tierra en el último tercio de cada noche y dice : « ¿Quién Me está elevando una plegaria para que Yo pueda responderla? ¿Quién Me está pidiendo algo para que Yo pueda concedérselo? ¿Quién está buscando Mi perdón para que yo pueda perdonarle? Y de esta manera Él continúa hasta que brilla la luz del alba. » Relatado por Muslim en su Auténtico.
Muchos relatos nos incitan hacer súplicas durante el ayuno, y a la hora de romperlo, y que de entre las súplicas respondidas , están las del ayunante hasta que rompa su ayuno o cuando este lo esté rompiendo. Allah Glorificado y Ensalzado sea nos ordenó hacer dua y se encargó de responderlo : « Y vuestro Señor ha dicho: Llamadme y os responderé.»(40.60)
El musulmán debe vivir los cortos momentos de su vida siendo cuidadoso con todo lo que le beneficie y evitando lo que pueda dañar su religión, su vida y la del Más Allá sobre todo durante los momentos benditos del mes de Ramadán que son días irremplazables e inestimables , días que son testigos sobre los obedientes y sus actos y testigos sobre los desobedientes y los negligentes y sus pecados y negligencia.
Has de organizar tu tiempo con exactitud para que no se pierda sin hacer algo beneficioso y provechoso ya que eres responsable de tus actos y tendrás que rendir cuentas sobre ellos.
Y me alegro de poder ofrecer al estimado lector un pequeño programa para organizar su tiempo durante el mes de Ramadán y tal vez lo aplique durante el resto de los meses de nuestra corta vida:
Al terminar de rezar el fayr , el musulmán debe permanecer en la mezquita leyendo el Glorioso Corán y las súplicas de la mañana y recordar a Allah hasta que salga el sol .
Al salir (un cuarto de hora más o menos, o sea después de terminarse el tiempo en el que está prohibido rezar) reza dos rakaat o lo que puede para que gane una recompensa igual que a una peregrinación mayor (Hayy) y menor (Umrah) . Dijo el Mensajero de Allah- que la paz y las bendiciones de Allah sean con él-: "Quien reza el Fayr en grupo, y permanece en la misma mezquita o el mismo lugar donde ha rezado haciendo Dhikr hasta que salga el sol y reza dos rakaat recibe la recompensa de un Hayy y una Umra por completo." Relatado por Tirmidi.
Y tenemos en el Mensajero de Allah –que la paz y las bendiciones de Allah sean con él- y en sus compañeros el mejor de los ejemplos, porque ellos al terminar de rezar el fayr, permanecían en la mezquita recordando a Allah hasta que saliera el sol.
Es conveniente luego que duerma hasta que llegue la hora de ir al trabajo. Durante el horario de trabajo debe acordarse de que Allah Glorificado y Ensalzado sea lo ve, así que no se olvida de recordarle en todos sus momentos.
Debe asistir a tiempo a las cinco oraciones y en congregación .
Si la persona no tiene trabajo , es preferible para ella descansar después del duhr para prepararse para la oración de noche, de este modo su sueño se convierte en adoración.
Al realizar la oración del asr, lee las súplicas de la tarde y el Corán.
Después de la oración del magrib, descansa un rato y se prepara para la oración del isha y los tarawih.
Al terminar los tarawih realiza las tareas necesarias de su vida diaria durante dos horas más o menos y luego se acuesta hasta que se acerque la hora del suhur : se levanta , recuerda a Allah , hace sus abluciones , reza y permanece antes y después del suhur recordando a Allah, haciendo dua y pidiendo perdón hasta que se acerque la hora del fayr.
En resumen, el musulmán que busca la misericordia de Allah y que teme Su castigo debe vigilar sus actos y temer a Allah en todos los momentos , en secreto y en público y que su lengua no deje de recordar a Allah Glorificado y Ensalzado sea estando de pie, sentado o acostado como han sido descritos los creyentes por Él.
Una de las señales de la aceptación de las obras es estar apegado al temor a Allah( taqwa) porque Allah Glorficado y Ensalzado sea dice : «Allah sólo acepta de los que Le temen.» (5:27)
Y que la paz y las bendiciones de Allah sean con nuestro profeta Muhammad, con su familia y sus compañeros.
Sheij: Abdallah Bin Yarallah Al Yarallah –que Allah tenga misericordia de él-
Traducido por: Umm Ayman
Revisado por: Umm Abdulkarim Dziriya